Complemento sobre HANNA ARENDT: artículo "Comprender no es perdonar":
https://www.abc.es/cultura/cultural/abci-hannah-arendt-comprender-no-perdonar-201811280252_noticia.html?fbclid=IwAR1C3BkwmWs6qrnisK49OcO4dL-ndLp0nzs07pDUAr6kAmqc0l7qfxtfedw#ns_campaign=rrss-inducido&ns_mchannel=abc-es&ns_source=fb&ns_linkname=noticia-foto&ns_fee=0
¿Cuál es tu horizonte?
Entre el cielo y la tierra estás tú, Dios y tus herman@s
1 comentario:
Según el artículo del periódico ABC relativo al pensamiento de Hannah Arendt sobre el siguiente extracto: "Los acontecimientos políticos del siglo XX no tienen precedentes históricos y, por este motivo, entre otros, es necesario analizarlos y tratar de explicarlos y comprenderlos. Perdonarlos o justificarlos es ya otra cosa". Evidentemente se pueden analizar, pero jamás se podrá dar con una solución al problema del mal. Ella trata de ver cierta culpa entre los judíos por posible colaboración con los nazis. Pero tratar de ver las cosas desde una óptica que está alejada en el espacio y en tiempo, es irreal. Las personas, al final, siempre acaban por acomodarse a las doctrinas y las directrices del Estado, y las que no, serán perseguidas. Creo que no sería baladí preguntarse por qué sucedieron los terrible crímenes que se produjeron en Alemania y qué relación puede tener con toda la historia del pensamiento germano que hay detrás, desde Kant hasta Heidegger y demás filósofos que tanto predicamento han tenido y tienen en la actualidad, como por ejemplo Nietzsche. Ante todas estas filosofías racionalistas y supremacistas que abogan por la preeminencia del hombre o del superhombre, solo cabe como contrapeso parcial una ley moral de índole católica que se le imponga al individuo como ley suprema, si no, no habrá contención del mal, pues su erradicación es imposible, salvo que haya una intervención directa de Dios. Habla Hannah Arendt que "un elemento eficaz sería la unión supranacional del continente. Este elemento ya se pretendió llevar a cabo con el emperador Carlos I de España, el cual pretendía una "universitas cristiana", y fueron precisamente los alemanes con la ayuda inestimable de Martín Lutero, los que abortaron el intento. Abundando en otro ejemplo más cercano a nosotros, tenemos el caso de la guerra de los Balcanes en 1991, y fue Alemania la primera nación que reconoció a Croacia y Eslovenia como estados independientes, lo que provocó el desmembramiento de Yugoslavia.
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